HumanIA: El gran despertar del SER en la era de la Inteligencia Artificial

HumanIA: El gran despertar del SER en la era de la Inteligencia Artificial

Sep 30, 2024
¿Te has preguntado alguna vez por nuestro futuro próximo como humanidad?


Te has preguntado qué significa ser indispensable en el mundo de hoy y en el futuro próximo, donde los algoritmos procesan, clasifican y deciden qué información consumimos, influyendo en nuestro comportamiento y prácticamente decidiendo por nosotros qué comprar, qué ver, qué pensar e incluso a quién amar.


En los últimos años, la tecnología ha demostrado que no tiene límites. Hemos visto cómo la inteligencia artificial supera barreras inimaginables: cómo puede aprender, resolver problemas complejos e incluso imitar algunas de nuestras emociones.


Mientras muchos admiramos y celebramos estos avances, una inquietante pregunta surge en el fondo: ¿Qué tan preparados estamos como seres humanos para coexistir con este nuevo mundo digital, cuando le estamos concediendo a la tecnología, y puntualmente a la inteligencia artificial, todo aquello que nos identifica como humanos?


Porque sí, la tecnología nos empuja hacia adelante, hacia el desarrollo, hacia lo nunca antes visto. Nos lleva a un presente y un futuro donde el esfuerzo físico es reemplazado por lo robótico, y el esfuerzo intelectual, por la simplicidad de interactuar con chats automatizados soportados en potentes algoritmos. Algoritmos que, a medida que interactuamos más con ellos, aprenden de nosotros mismos, de nuestro comportamiento, de lo que nos hace únicos.


De repente, podríamos darnos cuenta de que la inteligencia artificial, en cualquiera de sus presentaciones o evoluciones —ya sea generativa, multimodal, general, empática, neuro-simbólica— nos lleva a una realidad donde dependemos completamente de ella, a un estado de total vulnerabilidad que jamás imaginamos.


Nos enfrentamos al miedo de ser reemplazados, de perder nuestra esencia, de olvidar quiénes somos, rodeados de un entorno lleno de pantallas, dispositivos, datos y algoritmos. Estamos en un punto de inflexión, donde pareciera que la tecnología nos está ganando la partida. Sin embargo, esta no es la primera vez que la humanidad se enfrenta al miedo y a la incertidumbre de un cambio radical.


Pensemos en la Revolución Industrial. Cuando las máquinas comenzaron a reemplazar tareas manuales, muchos temieron la pérdida de empleos y la transformación total de la sociedad. Y aunque esos temores no eran infundados, también fue un momento en el que la humanidad encontró nuevas maneras de colaborar con las innovaciones. De esa sinergia nacieron nuevas industrias, roles, estilos de vida y formas de prosperar.


Un ejemplo más reciente lo vivimos con la llegada de los ordenadores personales y el Internet. Lo que inicialmente se percibió como una moda o una tendencia exclusiva para unos pocos, se convirtió en el eje central de nuestro existir. Hoy, gracias a Internet, podemos acceder en segundos a casi cualquier cosa que deseemos, amplificando nuestras capacidades humanas como nunca antes.


Estas historias nos recuerdan algo crucial: cada vez que enfrentamos un cambio significativo, también enfrentamos una oportunidad. Este no es un juego donde nuestra existencia depende de ganar o perder.


Es una nueva realidad donde es posible coexistir. Más aún, donde es posible integrar lo mejor de la tecnología con lo mejor de nuestra humanidad. Pero para lograrlo, primero necesitamos despertar nuestro SER. Despertar al valor de lo que somos como especie, despertar nuestra conciencia, hacernos responsables de nosotros mismos, reconocer nuestras fortalezas y virtudes individuales como seres humanos, y descubrir cómo estas pueden complementarse con los avances tecnológicos para construir un futuro más equilibrado.


Tess Consultores

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